lunes, 13 de agosto de 2007

Chay habla sobre las argentinas: "Son divinas y ardientes"...




Además, aseguró que son “diferentes a otras fans del resto del mundo”.
De todos modos, se declara fiel a su esposa.
El cantante puertorriqueño Chayanne se confesó en una entrevista que le realizaron la semana pasada. En ella, la estrella habló sobre su madre, las fans argentinas y su esposa."Mamá fue mi primera maestra, no sólo en el colegio, sino en la vida. Fue un ejemplo de mujer de quien aprendí el valor de la humildad, a soltar sin prejuicios mi pasión artística y a tratar a las chicas como deben hacerlo los buenos caballeros", dijo el artista.Chayanne también expresó su cariño por las mujeres argentinas: “Son divinas, y muy diferentes a otras del resto del mundo. Sé que lo que diga tiene alcance internacional y lo manifiesto con orgullo. Saben manejar con tanta sensualidad la coquetería como nadie más. Son tan ardientes que desatan su pasión sin importarles nada más que lo que sienten. Y eso enloquece a cualquier hombre.”El músico está presentando actualmente su disco número 20: “Mi tiempo”, nombre sobre el que reflexionó: "Tiempo es la palabra común a muchas canciones de este disco y la riqueza más grande que el hombre tiene en una época de velocidad extrema. He llegado a desear que el día tenga 48 horas para contentar a mis dos vidas: la artística y la personal. Y recapacité sobre la importancia de la calidad y de la buena distribución de mi tiempo. Si paso siete días de gira, debo volver a casa durante tres, para poder continuar. Porque jamás me verán lejos de los míos durante un mes".Chayanne se declara fiel a la abogada venezolana y finalista de Miss Venezuela 1988, Marilisa Marronesse, su mujer desde principios de los `90 y madre de Lorenzo Valentino (10) e Isadora Sofía (6). "El motor de mi vida. Ellos me hacen sentir humano"."A los artistas siempre nos inventan romances, pero es parte del juego. Disfruto de mi mujer y renuevo nuestro amor conquistándola constantemente. Me gusta llegar a la casa e invitarla a bailar en nuestra propia sala y enamorarla con pequeños detalles: desde recordarle lo mucho que la quiero, hasta sorprenderla de repente invitándola a un viaje a Venecia, nuestro destino favorito. Lo que yo deseo es que, en nuestro hogar, nunca se pierda el romance ni el amor", finalizó.

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